DOCUMENTO DE INFORMACIÓN SOBRE EL PROYECTO (FONDO DE PREPARACIÓN DEL FONDO COOPERATIVO PARA EL CARBONO DE LOS BOSQUES) ETAPA DE FORMULACIÓN DE LA IDEA DEL PROYECTO Informe n.63397: (El número de informe es generado automáticamente por la Unidad de Documentos Internos y no debe modificarse) Nombre del proyecto Preparación para el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques y la Reducción de las Emisiones Debidas a la Deforestación y la Degradación Forestal (REDD) en Costa Rica Región América Latina y el Caribe País Costa Rica Sector Forestal (AT) Instrumento de financiamiento Compensación de las emisiones de carbono/donación del Fondo Fiduciario Número de identificación P123702 del proyecto Número de identificación No disponible del proyecto relacionado Prestatario(s) Gobierno de Costa Rica Organismo de ejecución Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (FONAFIFO), dentro del ámbito del Ministerio de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones (MINAET) Categoría ambiental [ ]A [ X ]B [ ]C [ ]FI [ ]Por determinar según el estudio preliminar Fecha de preparación 21 de junio de 2011 del documento de información sobre el proyecto Fecha estimada de finalización No disponible de la evaluación inicial Fecha estimada de la Junio de 2013 evaluación del paquete de preparación por parte del Comité de Participantes Decisión tras el examen de la Tras el examen de la idea del proyecto, se tomó la decisión idea del proyecto de continuar con la preparación de la operación. Otra decisión {opcional} Introducción y contexto Contexto del país 1. Costa Rica es un país de ingreso mediano alto, con una población de aproximadamente 4,5 millones de personas y un producto interno bruto per cápita de US$5800. Desde 1949, ha 1 sido una democracia estable, con Gobiernos elegidos democráticamente sin interrupciones y transiciones de poder pacíficas. Varios factores han contribuido a dicha estabilidad, entre los que se incluyen la abolición del ejército tras una breve guerra civil en 1948, la promulgación de una nueva constitución en 1949, mediante la cual se fundó uno de los primeros Estados de bienestar de América Latina, y la presencia de mecanismos eficaces de movilidad social. El Gobierno y las normas políticas de Costa Rica hacen hincapié en lograr un amplio consenso sociopolítico respecto de las principales políticas. Los principales sectores de economía/fuentes de ingreso y empleo de Costa Rica son la agricultura y el turismo; además, existe un creciente sector de manufactura de productos de alta tecnología. La pobreza y la desigualdad de ingresos son menores en Costa Rica que los promedios de América Latina y América Central. Sin embargo, se necesitan ciertas mejoras, puesto que Costa Rica presenta un desempeño más bajo en algunas categorías estadísticas cuando se la compara con países de otras partes del mundo que tienen niveles de ingreso similares. 2. Desde 1986, Costa Rica ha sido un líder mundial en cuestiones de política ambiental y ha introducido programas innovadores, como el Certificado de Abono Forestal (CAF) y el Pago por Servicios Ambientales (PSA). A diferencia de la mayoría de los países tropicales, Costa Rica ha experimentado una reforestación neta durante los últimos 15 años. No obstante, algunas regiones del país siguen afectadas por la deforestación bruta y la degradación forestal. Si se continuara reduciendo la deforestación bruta y se incrementara aún más la cubierta forestal, se podrían aumentar los servicios ambientales para los ciudadanos de Costa Rica y para todo el mundo. Si bien es importante no aprovecharse injustamente de un futuro mecanismo internacional de pagos por concepto de las unidades de reducción de emisiones de carbono, no reconocer los esfuerzos iniciales de Costa Rica por reducir la deforestación y autofinanciar programas como el sistema de PSA enviaría una señal perjudicial y sería un incentivo indeseable para aquellos que actuaron con determinación en el pasado para combatir la deforestación y la degradación forestal. Por ende, Costa Rica posiblemente podría beneficiarse de un futuro mecanismo mediante el cual la comunidad internacional ofreciera incentivos a los países para la reducción de las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación forestal (REDD-Plus)1. En vista de su experiencia y compromiso, la introducción de un mecanismo de REDD por parte de Costa Rica también podría brindar un caso de aprendizaje de relevancia mundial. Contexto sectorial e institucional 3. Se calcula que Costa Rica tiene una cubierta forestal de 2,6 millones de hectáreas, lo que representa el 51% del territorio nacional. Desde 2000 hasta 2010, Costa Rica experimentó un aumento de la cubierta forestal neta de aproximadamente 23 000 hectáreas por año, es decir, el 0,9% anual2. Sin embargo, la deforestación bruta sigue ocurriendo y afecta a entre 35 000 hectáreas y 40 000 hectáreas por año, aproximadamente3. Los bosques de Costa Rica se 1 El significado completo de REDD-Plus es “reducción de las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación forestal, incluyendo el manejo sostenible de los bosques, el papel de la conservación y el aumento de las reservas forestales de carbono�. En este documento, se lo mencionará como “REDD�. 2 Estas cifras del período comprendido entre 2000 y 2010 provienen de la Evaluación de los Recursos Forestales Mundiales 2010, realizada por la Organización de las Naciones Unidas para Alimentación y la Agricultura. La Propuesta de Preparación para REDD indica una tasa menor de reforestación neta de aproximadamente 12 800 hectáreas por año en el período comprendido entre 2000 y 2005. 3 Propuesta de Preparación para Costa Rica (2011). 2 encuentran en propiedades privadas rurales individuales (50%), en zonas protegidas de propiedad privada (19%), en territorios comunitarios indígenas (10%) y en zonas protegidas estatales (21%). Los bosques están dispersos en las áreas rurales de todo el país, con algunos grandes bloques compuestos de zonas protegidas y territorios indígenas colindantes principalmente en el sur y el este del país. Existen 24 territorios indígenas que cubren el 7% del territorio nacional. 4. El principal factor que impulsa la deforestación en los terrenos privados es la conversión de los bosques para el uso agrícola y ganadero. En muchos casos, los usuarios de la tierra generan un ingreso anual más alto con la agricultura o la cría de ganado que con los bosques, condicionados por factores tales como el acceso vial. Esta situación a veces se ve agravada por las políticas que favorecen el desarrollo agrícola. En las zonas protegidas, la falta de financiamiento suficiente y la falta de recursos humanos dan lugar a la entrada de ocupantes y leñadores ilegales. A pesar de la existencia de un sistema de titulación relativamente seguro, las cuestiones de tenencia de la tierra también juegan un papel importante: en los territorios indígenas, algunas comunidades tienen dificultades para evitar que los agricultores no indígenas invadan sus tierras forestales; por otra parte, en las zonas protegidas de propiedad privada, las dificultades para obtener un título de propiedad válido impiden la participación en programas tales como el programa de PSA, que se describe a continuación. 5. El programa de PSA, aún en funcionamiento, tiene como objetivo abordar directamente el aspecto económico de la deforestación al realizar pagos directos a los terratenientes privados por la protección o la recuperación de los bosques. Desde su creación, el programa de PSA ha abarcado alrededor de 9500 propiedades, que cubren un total de 728 000 hectáreas, incluidos 21 territorios indígenas de 66 000 hectáreas. Solamente en 2009, se inscribieron alrededor de 4500 propiedades en el programa de PSA, lo que representa un total de 284 000 hectáreas. El presupuesto anual del programa de PSA aumentó de unos US$3 millones en 1997 a unos US$30 millones en 2010, incluido el respaldo proveniente de un préstamo del Banco Mundial. El programa de PSA incluye una amplia participación de diversas partes interesadas que representan los intereses locales, nacionales e internacionales. La experiencia obtenida con el programa de PSA le permitió a Costa Rica fortalecer su marco jurídico, sus instituciones, su capital social y su forma de gobierno, y probablemente sería una de las piedras angulares de la estrategia de REDD de dicho país. 6. La principal institución responsable de las iniciativas de REDD en Costa Rica es el FONAFIFO, organismo semiautónomo que depende del MINAET. El Sistema Nacional de �reas de Conservación coordinará las posibles actividades relacionadas con los bosques en las zonas protegidas. 7. Desde su creación en 1986, los programas de CAF y PSA han sido financiados principalmente con recursos nacionales (por ejemplo, un impuesto sobre las ventas de combustibles fósiles) y con dos préstamos del Banco Mundial, complementados con donaciones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial4, lo que destaca el compromiso sostenido de Costa Rica con la protección forestal. El primer préstamo del Banco Mundial fue no adicional y 4 El programa de PSA ha recibido el respaldo de dos proyectos del Banco Mundial: i) Ecomercados I (P052009/P061314, de 2000 a 2006), y ii) el proyecto de integración de instrumentos basados en el mercado para la gestión ambiental (Ecomercados II; P093384/P098838, de 2006 a la fecha). 3 reemplazó el financiamiento obtenido mediante el impuesto nacional sobre los combustibles, pero el segundo préstamo es adicional. Otras fuentes han contribuido al fondo general, aunque en menor medida, incluido el financiamiento otorgado por el Instituto Alemán de Crédito para la Reconstrucción. Por otra parte, Costa Rica hoy hace hincapié en que los beneficios mundiales de su programa de protección forestal no han sido acompañados por transferencias financieras internacionales, y el país ha soportado la mayor parte de los costos por su cuenta. En la actualidad, Costa Rica procura obtener un nuevo mecanismo de financiamiento que recompense los servicios relativos al carbono que brinda a todo el mundo. Se prevé que las iniciativas de REDD permitirán a Costa Rica recibir transferencias financieras sostenibles de la comunidad internacional y, al mismo tiempo, consolidar, mejorar y ampliar el programa de PSA. Relación con la estrategia de alianza con el país 8. El temario de REDD de Costa Rica y su participación en el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques se ajustan plenamente a la estrategia de alianza con el país (EAP) del Banco Mundial que el Directorio Ejecutivo analizó el 25 de julio de 2008. La EAP establece que “el innovador programa de pagos por servicios ambientales desarrollado por Costa Rica ha tenido un gran éxito en la promoción de la conservación de los bosques y de la biodiversidad, pero enfrenta desafíos en cuanto a la sostenibilidad financiera y al aumento de la participación de los pobres en los programas de conservación�. La propuesta de preparación para REDD de Costa Rica, descrita en la Propuesta de Preparación (R-PP) para REDD, intenta tomar como punto de partida el éxito obtenido en el pasado y alcanzar un futuro financiera y ecológicamente sostenible. Existe un amplio margen para complementariedades con el actual proyecto Ecomercados II, que se encuentra en la fase de ejecución y se prevé que continúe hasta 2013, por lo que se superpondrá con la mayor parte o la totalidad de la fase de preparación para REDD propuesta. Mediante un posible contrato de compraventa de reducciones de emisiones (CCRE), se podría comenzar a adquirir carbono dentro de dos años, al finalizar el proyecto Ecomercados II. En este sentido, REDD es una evolución lógica de Ecomercados II y se basará en dicho proyecto. 9. La iniciativa REDD de Costa Rica también está en consonancia con sus propias prioridades y estrategias nacionales. El Gobierno estableció una meta ambiciosa: neutralizar las emisiones de carbono para el año 2021. Si bien aún la estrategia para lograr esta meta no se ha finalizado, las iniciativas forestales y de REDD indudablemente cumplirán un papel importante como una de las áreas en que se pueden reducir las emisiones. Asimismo, las iniciativas REDD posiblemente contribuirán al logro de varias de las metas estratégicas descritas en el Plan Nacional de Desarrollo 2011-14, en especial al consolidar la posición ambiental de Costa Rica a nivel mundial, fomentar los mecanismos participativos y respaldar el desarrollo de las comunidades rurales. Objetivo de desarrollo propuesto A. Objetivo de desarrollo del proyecto propuesto 10. El objetivo general a largo plazo del compromiso propuesto del Banco Mundial/ Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques en Costa Rica es el siguiente: ayudar a Costa Rica 4 a reducir las emisiones de carbono derivadas de la deforestación y la degradación forestal, gestionar de manera sostenible los bosques, y conservar y mejorar las reservas forestales de carbono (REDD-Plus) de manera racional en términos sociales y ambientales, a la vez que se obtiene acceso a incentivos financieros internacionales para los usuarios de los bosques locales, lo que ayudará a mitigar el cambio climático a nivel mundial. 11. En consonancia con la estructura del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques (anexo 2), el compromiso del Banco Mundial/ Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques con Costa Rica posiblemente tendría dos fases, denominadas generalmente “preparación para la iniciativa de REDD� y “ejecución de la iniciativa de REDD�. • En primer lugar, la fase de preparación para la iniciativa de REDD consistiría en la realización de estudios analíticos y consultas, y estaría respaldada por la donación propuesta de US$3,4 millones del Fondo de Preparación del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques5. • En segundo lugar, la fase de ejecución de la iniciativa de REDD consistiría en la realización de pagos basados en el desempeño por las reducciones verificadas de emisiones de carbono, y podría financiarse mediante un CCRE dentro del ámbito del Fondo del Carbono del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques6. 12. El objetivo general establecido en el párrafo 10 se refiere al proceso completo, de dos fases, de la iniciativa de REDD. Sin embargo, hay que tener en cuenta tres aspectos clave que resultan de la naturaleza innovadora de REDD: i) muchas de las condiciones que constituyen la base de la futura ejecución de la iniciativa de REDD aún se están analizando en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y en otras negociaciones internacionales; ii) Costa Rica es uno de los primeros países que participa en la fase de preparación para la REDD, y no existen precedentes de países que hayan completado este proceso, y iii) todavía se están definiendo las modalidades operacionales del Fondo del Carbono del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques como prueba piloto para transacciones basadas en los resultados. 13. En este contexto, el compromiso del Banco Mundial con las iniciativas de REDD en Costa Rica se centrará en la preparación de los elementos que actualmente se consideran 5 Costa Rica ya recibió una donación para formulación de US$200 000 del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques, como capital inicial para formular la Propuesta de Preparación para REDD. Esta donación para formulación finalizó el 31 de julio de 2010. El Comité de Participantes, órgano rector del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques, ha autorizado al Banco a suscribir una donación para preparación de US$3,4 millones con Costa Rica. 6 Cuando Costa Rica presentó la Propuesta de Preparación para REDD, en abril de 2011, también expresó su interés en participar como país piloto en el nuevo Fondo del Carbono del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques. En consonancia con la estructura de dos fases del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques, la fase de preparación para la iniciativa de REDD (con el Fondo de Preparación) se realizaría en paralelo con la preparación de un posible programa de reducción de emisiones (con el Fondo del Carbono). De acuerdo con las reglas de operaciones del Fondo del Carbono, la firma de un CCRE en el ámbito del Fondo del Carbono del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques está condicionada a que los participantes del Fondo del Carbono seleccionen un programa de reducción de emisiones de Costa Rica y a que el Comité de Participantes del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques haga una evaluación positiva del paquete de preparación del país. 5 indispensables para los futuros acuerdos sobre REDD7 de una forma que optimice los resultados sociales y ambientales probables de REDD y haga hincapié en el aprendizaje y el intercambio de conocimientos. Desde esa perspectiva, el objetivo más inmediato del compromiso del Banco Mundial/ Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques sería que Costa Rica esté preparada para la futura ejecución de la iniciativa de REDD mediante la elaboración de los elementos, los sistemas o las políticas clave que sean necesarios, lo que generalmente se denomina “paquete de preparación para REDD�, de manera racional en términos sociales y ambientales. B. Resultados clave 14. El resultado clave de la donación de preparación para REDD sería la elaboración del “paquete de preparación para REDD� de Costa Rica, que incluiría lo siguiente: • diseño de estrategias de REDD8, incluido un sistema de distribución de beneficios; • desarrollo de una base nacional, también denominada “nivel de referencia�; • creación de un sistema nacional de medición, reporte y verificación; • evaluación estratégica ambiental y social (SESA por sus siglas en inglés), y elaboración de un marco de gestión ambiental y social (MGAS); • operación de un organismo de coordinación intersectorial para REDD, y ejecución de un proceso de consultas permanente que incluya a todas las partes interesadas relevantes9. 15. Se prevé que estos elementos clave estarán implementados al final de la fase de preparación, lo que proporcionará la base para un futuro CCRE dentro del ámbito del Fondo del Carbono del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques o de otra transacción basada en el desempeño de REDD similar que Costa Rica pudiera considerar. 16. Desde una perspectiva a más largo plazo, los resultados clave previstos para la futura ejecución de la iniciativa de REDD en Costa Rica probablemente incluirían los siguientes (aunque, por naturaleza, esta lista debería perfeccionarse durante la fase de preparación): • reducciones de las emisiones gracias a la ejecución de las estrategias de REDD; • acceso a ingresos adicionales por parte de los propietarios y las comunidades forestales participantes; • seguimiento constante y mitigación de los impactos ambientales y sociales (MGAS); 7 Los componentes fundamentales de un futuro mecanismo de REDD se definieron en la decimosexta reunión de la Conferencia de las Partes (CP-16) en la CMNUCC, celebrada en Cancún en diciembre de 2010. Véanse los Acuerdos de Cancún, decisión 1/CP.16 de la CMNUCC, sección C y anexo I. 8 Las estrategias de REDD pueden definirse como políticas, programas u otras intervenciones que reducen las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación forestal, gestionan de manera sostenible los bosques, y conservan y mejoran las reservas forestales de carbono. 9 El paquete de preparación a veces incluye cuatro elementos principales, que se refieren básicamente al mismo contenido (decisión 1/CP.16 de la CMNUCC, sección C, párrafo 71): a) una estrategia o un plan de acción nacional; b) un nivel de emisiones de referencia forestal nacional o un nivel de referencia forestal; c) un sistema de seguimiento forestal nacional sólido y transparente, y d) un sistema para proporcionar información sobre cómo se abordan y se respetan las salvaguardias [...] durante la ejecución de las actividades. 6 • mejor coordinación intersectorial en las zonas donde se realizan actividades de REDD; • consultas permanentes con las partes interesadas pertinentes y mayor participación de ellas, especialmente las comunidades cuyo sustento depende de los bosques, en la formulación de políticas relativas a REDD. Descripción preliminar 17. En general, el programa de PSA sería probablemente una de las piedras angulares de la estrategia de REDD de Costa Rica, con posibles mejoras que se definirían durante la fase de preparación. Otras actividades complementarían el programa de PSA. Costa Rica ha descrito varias medidas posibles para abordar los factores que impulsan la deforestación y la degradación forestal, y para mejorar y conservar las reservas forestales de carbono. Estas opciones, que se seguirán analizando y desarrollando mediante estudios y consultas en la fase de preparación, pueden incluirse en cinco categorías principales: i) aumento de la cobertura, el financiamiento y la consolidación del programa de PSA actual; ii) apertura del programa de PSA para incluir las zonas donde se realiza una gestión activa de los recursos forestales; iii) mejora de los sistemas de seguimiento y control de la tala ilegal; iv) respaldo para los programas catastrales y de regularización de las tierras, y v) mejora del control de incendios forestales. 18. Las actividades específicas de preparación para la iniciativa de REDD que Costa Rica prevé realizar para elaborar el paquete de preparación se describen en la Propuesta de Preparación para REDD e incluyen: consultas con las partes interesadas, estudios analíticos, fortalecimiento de la capacidad, y una evaluación estratégica de los impactos ambientales y sociales. Estas actividades se financiarían con una donación de preparación de US$3,4 millones del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques, y una donación paralela de US$1,7 millones de la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ), además de los fondos provistos por el Gobierno nacional y otros posibles donantes10. Las actividades que financiaría el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques no incluirían inversiones físicas ni proyectos piloto en el terreno. Principales riesgos y dificultades 19. Participación del público, derechos a los recursos y coordinación intersectorial. El programa de PSA parece haber establecido canales eficaces para promover la participación del público y respetar los derechos de los propietarios participantes. Sin embargo, existe preocupación, tanto en Costa Rica como a nivel internacional, por la posibilidad de que, si no se preparan con la participación plena de las partes interesadas clave, las iniciativas de REDD no beneficien completamente a las comunidades locales, menoscaben sus derechos a la tierra y los recursos, o debiliten sus estructuras sociales y políticas tradicionales. También preocupa la posibilidad de que los programas diseñados fuera del ámbito de REDD, por ejemplo, los 10 El presupuesto total para la preparación presentado en la Propuesta de Preparación para REDD es de US$6,5 millones, de los cuales US$3,4 millones provendrán de la donación del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques, y US$1,7 millones de la GIZ (financiamiento paralelo, no combinado). El saldo de US$1,4 millones podría ser financiado parcialmente por el Gobierno nacional, pero probablemente será financiado, al menos en parte, por donaciones paralelas de otros donantes aún no identificados. 7 relativos a la infraestructura y la energía, no estén en consonancia con un programa exitoso de REDD. 20. Estas tres cuestiones (participación de las partes interesadas, derechos a la tierra y los recursos, y coordinación intersectorial) se analizaron con las partes interesadas clave y los organismos del Gobierno durante el proceso de diligencia debida. En general, el Gobierno se comprometió a liderar un proceso participativo de REDD, dando prioridad a la participación significativa de todas las partes interesadas pertinentes, a las dimensiones sociales de REDD y a la coordinación intersectorial necesaria. Además, las partes interesadas clave, que en ocasiones han tenido opiniones críticas acerca de las políticas del Gobierno, expresaron una mayor confianza con respecto al FONAFIFO como principal organismo responsable de las iniciativas de REDD. El programa de PSA comenzó a trabajar con las comunidades indígenas con el respaldo del proyecto Ecomercados I y ha desarrollado una relación de trabajo muy buena con estas comunidades. Para muchas de ellas, el programa de PSA es el principal programa de financiamiento del Gobierno. El proyecto Ecomercados II incluye otras iniciativas tendientes a intensificar la participación de las comunidades indígenas. No obstante, el Gobierno reconoce la delicada naturaleza de las iniciativas de REDD, sobre todo respecto de la representación adecuada y la participación eficaz de los pueblos indígenas, y ha tomado medidas para abordar estos aspectos. Véanse las secciones 38 a 42, infra. 21. Adicionalidad. Existe el riesgo de que las medidas iniciales de Costa Rica para la conservación forestal no se vean compensadas en el marco de un régimen internacional de REDD si no se las considera “adicionales�, es decir, por encima del punto de referencia. La cuestión de la “adicionalidad� debe controlarse atentamente, aunque cada vez hay más consenso en que los países que han tenido un buen desempeño en el pasado deben ser recompensados para evitar incentivos indeseables y la posible pérdida internacional en esos países si decidieran no participar en las actividades de REDD. Además, algunas zonas de Costa Rica siguen afectadas por la deforestación bruta y la degradación forestal y, si se abordara este problema, se podrían aumentar los servicios ambientales para los ciudadanos de Costa Rica y de todo el mundo. 22. La definición de las actividades de REDD aún está en curso. A pesar del progreso logrado en la CP-16, celebrada en Cancún, las negociaciones internacionales todavía deben establecer las modalidades técnicas, legales y operacionales de REDD. Por lo tanto, es posible que la preparación no aborde todos los criterios principales que un mecanismo de REDD necesitaría con el tiempo. Sin embargo, los beneficios de participar desde las primeras etapas y respaldar a Costa Rica para que aproveche su experiencia y brinde un ejemplo a otros países parecen superar los riesgos de omitir algunas necesidades futuras de REDD que no se conocen actualmente. De todos modos, a fin de mitigar este riesgo, el equipo del Banco ayudará a seguir la evolución de los acontecimientos en las negociaciones internacionales y asesorará a Costa Rica acerca de las modificaciones pertinentes que puedan resultar necesarias durante el proceso de preparación. 8 Evaluación del organismo de ejecución 23. El FONAFIFO cuenta con una exitosa trayectoria en la ejecución de un programa de PSA que tiene muchos de los mismos elementos que la posible estrategia de REDD. Los pagos por servicios forestales son muy novedosos, y Costa Rica ha adquirido una experiencia inestimable en esta área. En particular, el FONAFIFO ha desarrollado capacidad para contratar terratenientes, realizar pagos y supervisar el cumplimiento. Esta trayectoria sugiere que el FONAFIFO tiene la capacidad crítica y el compromiso necesarios para participar eficazmente en un programa de REDD. 24. El FONAFIFO también cuenta con experiencia en la ejecución de proyectos financiados por el Banco Mundial (los proyectos Ecomercados I y II) y ha demostrado su capacidad para poner en práctica salvaguardias ambientales y sociales. Sin embargo, dada la naturaleza intersectorial y nacional de la iniciativa de REDD, las políticas de salvaguarda para las actividades del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques se aplicarán en un nivel más estratégico que en los proyectos anteriores. En ese sentido, el equipo del Banco Mundial está ayudando al FONAFIFO a diseñar una metodología para el proceso de SESA. El FONAFIFO prevé contratar especialistas calificados en ciencias sociales para que ayuden en el diseño y la ejecución de los aspectos sociales en general y de las salvaguardias sociales del proceso de preparación para la iniciativa de REDD. Evaluación de las partes interesadas en el proyecto 25. Las partes interesadas en las iniciativas de REDD son numerosas y diversas. El FONAFIFO ha identificado inicialmente una lista de 96 partes interesadas relevantes (PIR), que incluyen una serie de grupos de partes interesadas definidos en términos generales, a saber: i) organismos gubernamentales; ii) círculos académicos; iii) organizaciones internacionales; iv) organizaciones no gubernamentales (ONG); v) estructuras y organizaciones tradicionales de los pueblos indígenas, y vi) comunidades y organizaciones de campesinos. Se realizó una actividad de localización inicial de las partes interesadas para identificar a los grupos de partes interesadas clave de las 96 PIR que deberán participar directa y activamente en la fase de preparación. Además, el FONAFIFO prevé llevar a cabo un análisis más profundo de las partes interesadas para comprender sus funciones, mandatos y capacidades particulares, a fin de elaborar una estrategia más eficaz para su participación en el proceso de preparación. Asimismo, la identificación de las partes interesadas clave también será la base para la formación de un mecanismo de seguimiento del proceso de SESA. El FONAFIFO reconoce la función clave que los pueblos indígenas y los campesinos cuyo sustento depende de los bosques tienen en el proceso de preparación para la iniciativa de REDD, y prevé hacer participar y consultar plenamente a sus organizaciones, estructuras tradicionales, asociaciones y cooperativas. Asistencia técnica provista por el personal del Banco hasta la fecha 26. El equipo del Banco hizo comentarios sobre el primer borrador de la Propuesta de Preparación para REDD, elaborado por Costa Rica en abril de 2010, y realizó una misión de 9 asistencia técnica en Costa Rica en mayo de 2010. Teniendo en cuenta los comentarios del Banco, Panel Asesor Técnico (TAP por sus siglas en inglés) y del Comité de Participantes del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques, Costa Rica revisó su Propuesta de Preparación para REDD y lo volvió a presentar en noviembre de 2010. 27. En enero de 2011, se llevó a cabo una misión de debida diligencia. Esta misión incluyó dos visitas a territorios indígenas y propiedades rurales de las regiones del Atlántico y el Pacífico, además de debates con numerosas partes interesadas gubernamentales y no gubernamentales. El Bank Information Center (BIC) participó en la misión como observador oficial de la sociedad civil para el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques. Tras la misión, Costa Rica revisó la Propuesta de Preparación para REDD y dio a conocer la versión final en mayo de 2011. 28. El equipo del Banco también trabajó en estrecha colaboración con el FONAFIFO para elaborar el instrumento de la SESA. Los días 4 y 5 de mayo de 2011, se realizó en San José el taller nacional de SESA, como primer intento para informar a las partes interesadas y recibir comentarios sobre la metodología de SESA propuesta. El 11 de mayo de 2011, se llevó a cabo en la ciudad de Washington D.C un evento público dirigido por representantes del Gobierno de Costa Rica y de los pueblos indígenas, y copatrocinado por el BIC y Conservación Internacional, para informar y compartir opiniones con la sociedad civil internacional. Resumen de la evaluación de la Propuesta de Preparación para REDD 29. El Equipo del Proyecto examinó la Propuesta de Preparación para REDD de Costa Rica y otros documentos relacionados. En general, parece que la Propuesta de Preparación para REDD representa una base suficiente para la participación en la fase de preparación. Al parecer, el país ha identificado las cuestiones críticas pertinentes de REDD y elaborado procesos y planes para abordarlas durante la preparación y la ejecución de la iniciativa de REDD. Aparentemente, la Propuesta de Preparación para REDD contiene los elementos clave que probablemente se necesiten para un futuro mecanismo de REDD, según lo definido en la CP-16, celebrada en diciembre de 2010. Además, el Gobierno ha realizado un esfuerzo de buena fe por escuchar las opiniones de las partes interesadas clave en esta etapa y se ha comprometido a incorporarlas en el diseño de la estrategia de REDD. Al parecer, en vista de su experiencia y compromiso, la introducción de un mecanismo de REDD por parte de Costa Rica podría brindar un ejemplo de relevancia mundial. Aspectos técnicos 30. Opciones de estrategias de REDD. La Propuesta de Preparación para REDD indica que el programa de PSA probablemente sería una de las piedras angulares de la futura estrategia de REDD de Costa Rica. En consonancia con el enfoque del programa de PSA, el criterio actual es que los derechos de emisión de carbono y otros derechos de servicios ambientales se vincularían con la propiedad de las tierras y la realización de mejores prácticas de gestión. La distribución de beneficios se basaría en los sistemas creados para el programa de PSA, con modificaciones y enfoques complementarios, cuando fueran necesarios. La estrategia de REDD también incluiría 10 nuevas variantes del programa de PSA para impulsar la participación de una mayor cantidad y diversidad de propietarios, y fortalecer aún más los principios de equidad y transparencia. Podría diseñarse una variante específica de dicho programa para cumplir con las condiciones específicas de las comunidades indígenas. El carácter voluntario del programa de PSA se conservaría en el programa de REDD. En la Propuesta de Preparación para REDD se analiza cómo se estudiarán en mayor profundidad y se configurarán las opciones estratégicas mediante estudios analíticos y consultas. Sin embargo, incluso con las mejores opciones estratégicas, es de esperar que la deforestación bruta continúe en algunas zonas, acompañada de regeneración en otras zonas (lo que es económicamente racional, dado que las condiciones cambian con el tiempo). En la Propuesta de Preparación para REDD, se prevé la realización de análisis sistemáticos de costos de oportunidad para todas las opciones estratégicas, lo que incluye el análisis de los posibles costos de compensación en caso de pérdida de ingresos o restricción del acceso a los recursos naturales. Si bien en este momento no existe información detallada y explícita desde el punto de vista espacial sobre los factores que impulsan la deforestación y la degradación, el análisis de los costos de oportunidad ayudará a determinar los aspectos en que las iniciativas de REDD-Plus pueden resultar eficaces para reducir las prácticas degradantes en términos ambientales y marginales en términos económicos. Además, una de las tareas que se realizarán durante la fase de preparación es la evaluación crítica de los éxitos y los fracasos del programa de PSA, junto con la labor de diagnóstico de los factores que impulsan la deforestación. Costa Rica también analizará opciones para complementar el programa de PSA, sobre la base de los estudios y las consultas que se llevarán a cabo durante la fase de preparación. 31. Nivel de referencia. En la Propuesta de Preparación para REDD se indica que Costa Rica tiene un mapa de cubierta forestal del año 2005 y que se han realizado investigaciones sobre la fracción de carbono de los tipos de bosques. Se sugiere utilizar los datos históricos sobre las reservas de carbono del año 2005 para dar cabida a la compensación por las acciones iniciales. El enfoque parece razonable, y en la Propuesta de Preparación para REDD se describen los estudios analíticos necesarios. En cuanto al sistema de medición, generación de informes y verificación, y al nivel de referencia, Costa Rica dispone de un nivel de capacidad adecuado para diseñar estos sistemas durante la fase de preparación. A diferencia de los países con altas tasas de deforestación que podrían utilizar promedios históricos simples, Costa Rica debe encontrar una forma de diseñar un nivel de referencia que tenga sentido dadas sus circunstancias nacionales y que, a la vez, sea creíble. 32. Sistema de seguimiento. Costa Rica prevé diseñar un inventario forestal nacional continuo para calcular la biomasa de 1000 a 2000 parcelas. Esto se combinará con imágenes generadas por teledetección para calcular las reservas forestales de carbono anualmente. Hay planes para diseñar un sistema de seguimiento de los impactos socioeconómicos y ambientales. 33. Plataforma de gestión de REDD. Se creará un comité directivo de REDD. Este comité incluiría a los mismos miembros que el actual Directorio del FONAFIFO11, más dos lugares adicionales: uno para los pueblos indígenas y uno para un representante de los propietarios de tierras rurales y la sociedad civil, ambos con suplentes para brindar mayor flexibilidad. Los representantes de los pueblos indígenas se identificarían mediante un proceso de autoselección. 11 El Directorio del FONAFIFO está compuesto por el Sistema Bancario Nacional, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el MINAET y dos lugares para la Oficina Nacional Forestal (ONF). 11 Una secretaría de REDD, ubicada en el FONAFIFO, llevaría a cabo las funciones ejecutivas y las tareas de coordinación. Cabe destacar que el Comité Directivo de REDD reúne las características sugeridas por el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques para un Grupo de Trabajo de REDD: es multisectorial, incluye a las partes interesadas relevantes y está vinculado con los procesos políticos. Los ministerios vinculados más directamente con la deforestación (el MAG y el MINAET) participan en el Comité Directivo de REDD. La coordinación con otros sectores se realizaría en el ámbito del gabinete. El gabinete se reúne todas las semanas e incluye todos los ministerios. 34. Como parte del proceso de diligencia debida, se identificaron también las siguientes cuestiones, que demandarían atención especial durante la fase de preparación. 35. Representación y participación de los pueblos indígenas. Los territorios de los pueblos indígenas están organizados en asociaciones de desarrollo integral (ADI), estructura legal reconocida por la Ley Indígena de Costa Rica (1977). En la actualidad, 24 ADI tienen títulos de propiedad legales de los territorios indígenas. Las ADI están compuestas por miembros voluntarios de los pueblos indígenas. Según el territorio, la afiliación de miembros indígenas de las ADI puede ser de apenas un 15% o de hasta alrededor del 50%. En general, los pueblos indígenas perciben las ADI como estructuras impuestas desde afuera que no tienen plenamente en cuenta las estructuras políticas tradicionales de los pueblos indígenas. En ocasiones, las ADI son consideradas entidades administrativas no representativas e irresponsables que han debilitado las estructuras políticas y los procesos de toma de decisiones tradicionales de los pueblos indígenas. En algunos casos, las ADI incluyen miembros no indígenas que han invadido el territorio indígena y se han convertido en miembros de facto de las ADI. 36. En la práctica, si bien el grado de inclusión de las ADI es superior en la región del Atlántico que en la zona del Pacífico Sur, cabe destacar que las afiliaciones son inferiores al 50%, en promedio. En la región del Atlántico, las ADI han logrado integrar algunos de los organismos tradicionales en su estructura, pero esto no ocurre en la región del Pacífico. Por lo tanto, será necesario identificar las opiniones de los pueblos indígenas mediante consultas con su estructura tradicional o con las comunidades enteras, así como también con las ADI. Además, las ADI aparentemente son las únicas entidades reconocidas por el Gobierno para suscribir contratos de PSA y distribuir los fondos generados por ellos. En lo que respecta a las iniciativas de REDD, se procurará garantizar la inclusión. 37. Como organismo gubernamental responsable de las cuestiones indígenas, la Comisión Nacional de Asuntos Indígenas (CONAI) debía respaldar la estructura tradicional de los pueblos indígenas. En la práctica, la CONAI parece fortalecer más la función de las estructuras gubernamentales. Por ejemplo, no reconoce las estructuras políticas tradicionales de los pueblos indígenas. 38. Dentro del contexto antes descrito, el FONAFIFO ha identificado una amplia variedad de estructuras y organizaciones de pueblos indígenas que representan a dichos pueblos. Algunas de ellas son estructuras no tradicionales como las ADI, alianzas regionales como la Red Indígena Bribrí y Cabécar (RIBCA) y la Asociación Regional Aborigen del Dikes (ARADIKES), y organizaciones nacionales como la Mesa Nacional Indígena. El FONAFIFO también se 12 compromete a trabajar con las organizaciones representativas indígenas tradicionales, como los consejos o los clanes. En el primer taller nacional de SESA, el FONAFIFO garantizó la participación equilibrada de los pueblos indígenas de distintas regiones, tanto de las ADI como de otras estructuras tradicionales, organizaciones de pueblos indígenas y mujeres indígenas. Durante la etapa de preparación, el FONAFIFO prevé facilitar un proceso mediante el cual los pueblos indígenas propondrán procedimientos y mecanismos para realizar una serie de consultas adecuadas desde el punto de vista cultural con todas las formas de organizaciones representativas, y prevé aplicar los principios de consentimiento libre, previo e informado en consonancia con el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). 39. Tenencia de la tierra. En la Propuesta de Preparación para REDD, se indica que la mayor parte de las tierras rurales de Costa Rica pertenecen a agricultores individuales, la mayoría de los cuales tienen títulos de propiedad legales. Sin embargo, en algunas regiones aún no se han emitido títulos de propiedad formales, y en muchas regiones existen reclamos superpuestos y contradictorios respecto de la propiedad de la tierra, que a veces también involucran zonas protegidas y territorios indígenas. En la Propuesta de Preparación para REDD, se indica que se ha puesto en marcha un proceso para facilitar la regularización de las tierras y la resolución de los casos pendientes, especialmente a través del Programa de Regularización de Catastro y Registro (PRCR), actualmente en curso. Es posible que el PRCR deba fortalecerse aún más, dada la importancia que reviste para la resolución de los reclamos pendientes y contradictorios respecto de la propiedad de la tierra. El programa de PSA está respaldando el fortalecimiento institucional para lograr gradualmente que los pequeños agricultores que no tienen títulos de propiedad participen en el programa. El FONAFIFO colaborará con el PRCR para recopilar más información y ayudar a definir la forma en que un futuro mecanismo nacional de REDD abordaría la cuestión de las tierras sin títulos de propiedad o en disputa restantes. 40. Los territorios indígenas se crearon conforme al artículo 1 de la Ley Indígena de 1977. Las personas no indígenas no tienen derechos de propiedad ni posesión en las reservas indígenas. El artículo 5 establece que las personas no indígenas que tenían la propiedad o eran poseedores de buena fe antes de la sanción de la Ley Indígena pueden ser sujetas a expropiación de acuerdo con los procedimientos de la Ley de Expropiación y que tienen derecho a recibir una indemnización. A pesar de la garantía del artículo 3 de la Ley Indígena, la ocupación ilegal de tierras indígenas por parte de personas no indígenas persiste. El Gobierno ha expresado en varias ocasiones su compromiso de librar a las reservas indígenas de las fincas no indígenas. Sin embargo, el proceso ha sido lento y aún existe una cantidad considerable de casos sin resolver. Los casos pueden dividirse en dos categorías básicas. La primera categoría incluye las fincas que son anteriores a la Ley Indígena. La segunda categoría incluye a los colonos que se asentaron en las reservas indígenas después de la sanción de la Ley Indígena y que no tienen derechos legales sobre la tierra (ocupantes ilegales). Estas situaciones limitan el ejercicio de actividades tradicionales y podrían infringir futuros derechos del carbono. 41. Las comunidades indígenas tienen un derecho de propiedad colectivo sobre las reservas respecto de las cuales tienen títulos a través de las respectivas ADI; conforme a la Ley Indígena, la propiedad individual de las tierras no está reconocida en los territorios indígenas. Los pueblos indígenas que actualmente viven en las reservas siguen realizando la gestión forestal bajo un régimen de propiedad colectiva. Sin embargo, la propiedad y el uso colectivos no están 13 totalmente reconocidos en el sistema de PSA y aún se los trata como propiedad privada, sin reconocer los patrones tradicionales de tenencia de las tierras. Los pagos del programa de PSA se realizan exclusivamente a las ADI como únicas representantes legalmente reconocidas de las comunidades indígenas. 42. La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia ha reconocido que las ADI no son formas ideales de representación indígena puesto que imponen estructuras ajenas a los pueblos indígenas. Sin embargo, ha confirmado su legalidad como la única opción adecuada disponible conforme a la legislación vigente. Recientemente se admitió un caso presentado por miembros del pueblo térraba, el cual sigue pendiente en la Sala Cuarta de la Corte Suprema. La decisión puede tener consecuencias importantes para el futuro de las ADI y, por ende, afectar las actividades de REDD. 43. El PRCR podría utilizarse para facilitar la resolución de los conflictos relativos a la tenencia de las tierras, ya que produce la información cartográfica necesaria para el deslinde de las tierras, lo cual, a su vez, es un paso necesario para la titulación de las tierras. En la Propuesta de Preparación para REDD, se indica que el FONAFIFO elaborará un plan de acción junto con el PRCR y las ADI a fin de producir información técnica y realizar los análisis legales pertinentes para facilitar la recuperación de las tierras indígenas. Estas actividades incluirían las siguientes: a) solicitar a todos los territorios indígenas que identifiquen a los propietarios y ocupantes no indígenas de sus territorios; b) analizar los procedimientos de regularización anteriores (por ejemplo, indemnización, expropiaciones y desalojos); c) asistir a los territorios indígenas mediante asesoramiento sobre las medidas que deben tomar, y d) analizar las prácticas indígenas de gestión de las tierras conforme al derecho consuetudinario. 44. Coordinación intersectorial. La coordinación intersectorial es esencial para la REDD porque i) la REDD debe contribuir al desarrollo general de las comunidades rurales, y ii) muchos de los factores que impulsan la deforestación y la degradación provienen de ámbitos no pertenecientes al sector forestal. En Costa Rica, existen algunos organismos intersectoriales en funcionamiento relacionados con el desarrollo rural y los bosques. En primer lugar, el ministerio a cargo de la REDD, el MINAET, es responsable de las cuestiones ambientales y de la energía, por lo que la coordinación entre estos dos sectores debería verse facilitada. Además, el Directorio del FONAFIFO, que formará la base del comité directivo de la iniciativa de REDD, incluye el Sistema Bancario Nacional, el MAG, el MINAET y la ONF. Sin embargo, lo más importante es la disposición, expresada en las altas esferas políticas, a utilizar un enfoque coordinado para aumentar la sostenibilidad ambiental y mejorar el desarrollo rural. 45. En Costa Rica, el sector de energía posiblemente podría desempeñar una función importante para el éxito de una futura estrategia de REDD, especialmente con respecto a la energía hidroeléctrica. Al parecer, una serie de proyectos de energía hidroeléctrica que han estado en los planes del Gobierno durante varios años se han topado con expresiones de desacuerdo de varias comunidades locales. Específicamente, los térrabas se quejaron de que la represa Diquis propuesta se preparó sin realizar las consultas correspondientes y pondría en riesgo sus derechos y sus medios de subsistencia al inundar una parte de su territorio forestal. El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial (CERD) examinó la situación de los térrabas en agosto de 2010 y en marzo de 2011. El CERD también expresó su preocupación 14 respecto de que, según la información que había recibido, el pueblo térraba no había sido consultado ni invitado a participar en el proceso de toma de decisiones. Además, el CERD recomendó que el Gobierno de Costa Rica intensifique sus esfuerzos para proteger los derechos de tenencia de las tierras de los pueblos indígenas. También le recordó al Gobierno que debe cumplir con la decisión de la Corte Suprema que solicita que delimite los territorios de las comunidades indígenas de Rey Curré y de los térrabas y los borucas. El CERD ha solicitado al Gobierno que, antes del 31 de julio de 2011, brinde información adicional sobre el progreso del proyecto de la represa Diquis y más detalles sobre la forma en que el Gobierno procurará obtener el consentimiento libre, previo e informado de los pueblos indígenas y su participación en todas las etapas del proyecto. El Relator Especial sobre los derechos indígenas de las Naciones Unidas también visitó Costa Rica en abril de 2011, y se prevé que pronto se emita un informe público sobre esta visita. En el contexto de esta visita, el Gobierno confirmó su compromiso de llevar a cabo un proceso de desarrollo inclusivo y transparente, y de respetar las leyes nacionales e internacionales relativas a los derechos de los pueblos indígenas. Aspectos sociales y ambientales 46. Se realizará una SESA en consonancia con las políticas operacionales y de salvaguarda del Banco Mundial. La SESA tiene como objetivo integrar las consideraciones ambientales y sociales clave en la preparación para la iniciativa de REDD mediante la combinación de enfoques analíticos y participativos. Además, permitiría integrar las consideraciones sociales y ambientales en la estrategia de REDD, y fomentaría la participación de las partes interesadas en la identificación de cuestiones clave y el establecimiento de prioridades al respecto, y la evaluación de las deficiencias normativas, institucionales y de capacidad. Sobre la base de la SESA, se implementará un MGAS como parte del paquete de preparación, a fin de gestionar los riesgos ambientales y sociales y mitigar los posibles impactos adversos. Se prevé que el informe independiente de la SESA esté listo para la reunión de examen de los avances realizados (véase el párrafo 95). De todos modos, el informe independiente del MGAS formará parte del paquete de preparación (es decir, al final de la fase de preparación; véase el párrafo 95). 47. El FONAFIFO organizó el primer taller nacional de SESA (4 y 5 de mayo de 2011) con los grupos de partes interesadas clave relevantes de todo el país, con los siguientes objetivos: i) informar a las partes interesadas sobre la propuesta revisada de Costa Rica para diseñar una estrategia nacional de REDD, y ii) proporcionar la plataforma inicial para que las partes interesadas relevantes planteen cuestiones e inquietudes relacionadas con la propuesta. En este taller, se llevó a cabo un ejercicio de determinación del alcance de los problemas basado en las opciones estratégicas consideradas para el diseño de la estrategia nacional de REDD. Los debates se centraron en la identificación de los riesgos y los beneficios de cada opción estratégica de REDD propuesta desde la perspectiva específica de cada uno de los grupos de partes interesadas clave relevantes, y en la extracción de las cuestiones y las inquietudes en particular. 48. En función de los comentarios de las partes interesadas, el FONAFIFO está redactando el borrador de un plan de trabajo de SESA que describe los pasos del proceso de SESA durante la fase de preparación. Este plan de trabajo será un documento vivo, sujeto a revisión a medida que se avance en el diseño de la estrategia nacional de REDD. Mediante una estrategia paralela de comunicaciones, se respaldará la divulgación de información sobre las opciones estratégicas, los 15 riesgos y los beneficios, a fin de fortalecer las plataformas y los procesos participativos, y crear conciencia sobre la estrategia nacional general de REDD. El plan de trabajo de SESA incluirá directrices operacionales específicas sobre los próximos pasos y actividades, los vínculos específicos con el diseño de la estrategia nacional general de REDD y los componentes específicos de la Propuesta de Preparación para REDD, los estudios que se deberán realizar, el presupuesto, los mecanismos institucionales, y un cronograma. La SESA involucra a las partes interesadas locales, que son quienes están en mejores condiciones para identificar los posibles beneficios y riesgos. Como la iniciativa de REDD será un programa nacional, en la SESA participarán las partes interesadas locales con una cobertura nacional, lo cual es un desafío en lo que respecta a la gestión, por lo que el FONAFIFO contratará a un especialista en ciencias sociales para que brinde orientación sobre el proceso. Durante el proceso, se considerarán en detalle los posibles pagos por concepto de las unidades de reducción de emisiones de carbono y las distribuciones de los beneficios. B1. Aspectos sociales (con inclusión de las salvaguardas) 49. Para la elaboración de la estrategia de REDD, el FONAFIFO prevé: i) identificar todas las instituciones/organizaciones de partes interesadas clave (incluidas las organizaciones representativas de los pueblos indígenas y las comunidades de campesinos no indígenas); ii) localizar las instituciones y organizaciones clave que tienen el mandato, la función, las capacidades o los recursos necesarios para la ejecución exitosa de la estrategia, y iii) implementar una distribución de beneficios mutuamente aceptable y equitativa de los ingresos asociados al carbono, en estrecha consulta con los representantes de las comunidades de pueblos indígenas y campesinos. 50. Con respecto a la SESA, el FONAFIFO prevé: i) elaborar un borrador del plan de trabajo de SESA basado en los comentarios recibidos en el taller nacional de SESA y difundirlo entre las partes interesadas, y ii) realizar los estudios analíticos y diagnósticos relacionados con los impactos, riesgos y beneficios ambientales, sociales y legales de acuerdo con el plan de trabajo de SESA acordado con las diversas partes interesadas durante la preparación de la estrategia de REDD. Al final de la fase de preparación, el FONAFIFO presentará un informe autónomo de la SESA que documentará lo siguiente: a) el proceso de consulta sobre los estudios analíticos; b) los riesgos y beneficios de las opciones de REDD propuestas, y c) los desafíos contextuales que podrían mejorar o menoscabar la estrategia de REDD. 51. Sobre la base del proceso de SESA, se elaborará un MGAS para gestionar los impactos posteriores a la ejecución de la estrategia nacional de REDD. El MGAS será uno de los elementos específicos del paquete de preparación. Todas las deficiencias identificadas para la gestión de riesgos y posibles impactos en relación con las políticas de salvaguardia pertinentes del Banco Mundial se determinarán junto con las opciones estratégicas para incorporarlas en la preparación del MGAS. El MGAS brindará un marco para gestionar y mitigar los posibles impactos ambientales y sociales relacionados con actividades y proyectos específicos, incluidas las inversiones y transacciones del mercado del carbono, en el contexto de la futura ejecución del programa de REDD. 16 52. Salvaguardas sociales. En la Propuesta de Preparación para REDD, se han determinado las políticas de salvaguardia sociales pertinentes del Banco que se prevé aplicar. Se elaborará un MGAS de acuerdo con las políticas de salvaguardia del Banco Mundial. 53. Política sobre Pueblos Indígenas (OP 4.10). El FONAFIFO prevé realizar la evaluación social necesaria y elaborar un marco de planificación para los pueblos indígenas en estrecha consulta con las comunidades de dichos pueblos, de acuerdo con la Política sobre Pueblos Indígenas, como un capítulo específico del MGAS. La OP 4.10 exige el apoyo general de la comunidad de los pueblos indígenas afectados basado en consultas previas, libres e informadas durante la fase de preparación. Costa Rica también confirmó su decisión de cumplir con las leyes nacionales e internacionales vigentes, especialmente con el Convenio 169 de la OIT, que incluye el principio del consentimiento libre, previo e informado de los pueblos indígenas. 54. Política de Reasentamiento Involuntario (OP 4.12). El Gobierno ha indicado que la participación en las actividades de REDD seguirá basándose en el enfoque voluntario desarrollado en el programa de PSA. El FONAFIFO elaborará el marco sobre políticas de reasentamiento (MPR) requerido y el conjunto de normas de procedimiento en estrecha consulta con los representantes de los pueblos indígenas, las comunidades de campesinos y los terratenientes privados. El MPR abordaría las posibles reubicación e indemnización de los terratenientes privados que actualmente viven en zonas protegidas. El conjunto de normas de procedimiento ayudaría a gestionar el posible riesgo de restricción del acceso a los recursos naturales, por ejemplo, en las zonas protegidas. El MPR y el conjunto de normas de procedimiento se prepararán como un capítulo específico del MGAS. B2. Aspectos ambientales (con inclusión de las salvaguardas) 55. Evaluación Ambiental (OP/BP 4.01). Dado que el objetivo explícito de la estrategia de REDD es promocionar la reducción de la tasas de deforestación y degradación recompensando las medidas tendientes a la protección y conservación de los bosques, se prevé que los impactos ambientales de la estrategia sean, en general, positivos. A medida que la cubierta forestal aumente, también lo harán los beneficios vinculados con los bosques. No solo como sumideros de carbono, sino también por los numerosos servicios ambientales que brindan los bosques, como protección de las cuencas hidrográficas, provisión de hábitats importantes, fuente sostenible de productos forestales no madereros, y otros medios de subsistencia dependientes de los bosques. 56. El principal riesgo resultante de la iniciativa de REDD se produciría en el caso de que las estrategias no lograran sus objetivos, con lo cual se generarían impactos adversos indirectos no previstos a través de la creación no deseada de incentivos para desbrozar los bosques con otros fines. Esto sucedería, por ejemplo, si los esquemas de PSA no proporcionaran incentivos monetarios suficientes para conservar las zonas que tienen cubierta forestal. También podrían producirse riesgos similares si, por ejemplo, la falta de seguridad en la tenencia de la tierra menoscabara el compromiso de mantener la tierra con la cubierta forestal durante períodos prolongados. 17 57. Por estos motivos, y debido a la naturaleza crítica de las opciones y elecciones estratégicas que se están considerando, la OP 4.01 se aplica a las actividades de la Propuesta de Preparación para REDD. El instrumento principal para documentar los beneficios y los riesgos ambientales de la estrategia de REDD será la SESA. La SESA evaluará los riesgos sociales y ambientales clave y los posibles impactos asociados con las actividades de REDD, y desarrollará un MGAS para gestionar y mitigar los posibles riesgos e impactos durante la fase de ejecución. 58. Hábitats Naturales (OP/BP 4.04). Dado que la estrategia de REDD probablemente trabajará tanto dentro de las zonas protegidas como en otros hábitats forestales de diversa importancia, se aplicará la OP 4.04. Si las estrategias de REDD tienen éxito, se prevé que los impactos en los hábitats forestales críticos sean positivos; no obstante, la SESA evaluará los posibles riesgos relacionados con las opciones estratégicas en los hábitats forestales dentro de las zonas protegidas y en otros hábitats forestales sensibles que estén bajo control privado o comunal. Durante la formulación y la ejecución de la estrategia de REDD, se realizarán consultas con las partes interesadas clave para identificar las posibles causas de preocupación. Durante la fase de ejecución, se establecerán actividades para garantizar que los hábitats naturales importantes no se vean perjudicados. Se prevé que el MGAS incluirá disposiciones para evaluar los posibles impactos antes de llevar a cabo acciones en el terreno. 59. Bosques (OP/BP 4.36). Debido a la importancia de la iniciativa de REDD como parte de los programas de gestión forestal y ambiental a largo plazo de Costa Rica, y debido a la importancia que tienen los bosques para los medios de subsistencia de muchas comunidades, se aplicará esta política. La estrategia de REDD se basará principalmente en la experiencia del FONAFIFO con el programa de PSA. Durante la fase de preparación, se evaluarán estas y otras iniciativas de desarrollo forestal y rural para garantizar que las lecciones se incorporen desde el comienzo en el diseño y que los riesgos sociales y ambientales clave y los posibles impactos asociados con las actividades de REDD se consideren en el MGAS. La estrategia de REDD en sí no financiaría la explotación o la conversión de los bosques. Se prevé que la estrategia de REDD promueva el uso de la certificación forestal independiente. 60. Recursos Culturales Físicos (OP 4.11). Dada la incertidumbre respecto de los lugares exactos donde se realizarán las actividades de la estrategia de REDD, esta política se pone en práctica. Se podría considerar que algunos de los bosques o paisajes afectados por la estrategia de REDD tienen importancia histórica o cultural, por ejemplo, bosques de espíritus, valles sagrados u otras características del paisaje natural. El MGAS incluiría disposiciones específicas para evaluar la posibilidad de tales impactos antes de llevar a cabo acciones en el terreno. 61. Control de Plagas (OP 4.09). En la actualidad, no se prevé que la estrategia de REDD pueda financiar o derivar en un mayor uso de plaguicidas u otros productos químicos agrícolas. Sin embargo, es posible que, en algunas de las prácticas de gestión forestal aplicadas en las plantaciones, se utilicen métodos de silvicultura que incluyan el uso de plaguicidas. La SESA evaluará las posibilidades de que se utilicen dichos productos químicos en la gestión forestal y, si fuera necesario, se definirían las directrices y los enfoques analíticos correspondientes en el MGAS. Sobre la base de lo expuesto, se pone en práctica la política. B3. Consultas, participación y divulgación 18 62. La preparación para REDD incluye varios sectores y partes interesadas de todo el país en distintos niveles (nacional, regional y local). La realización de consultas adecuadas es fundamental para tener en cuenta las opiniones de las partes interesadas, generar apoyo político, aumentar las posibilidades de lograr los diversos beneficios que se esperan de la estrategia de REDD, y reducir el riesgo de generar impactos negativos no deseados. En Costa Rica, los objetivos principales y los desafíos para la realización de un proceso de consultas son los siguientes: i) un proceso de consultas multisectorial que incluya a todas las partes interesadas, basado en las estructuras actuales que fortalecen el capital social; ii) un proceso que mejore la gestión al intensificar la participación significativa de las partes interesadas en la toma de decisiones relativas al diseño de la estrategia nacional de REDD, y iii) un proceso que pueda facilitar la conversión de una visión común para el diseño de la estrategia nacional de REDD que sea compartida por todas las partes interesadas. 63. Experiencia obtenida hasta la fecha. Desde 2008, el FONAFIFO ha realizado numerosas sesiones de divulgación de información acerca de la propuesta de Costa Rica para el diseño de una estrategia nacional de REDD y, en particular, la elaboración de la Propuesta de Preparación para REDD. En la formulación de la Propuesta de Preparación para REDD (2009), participaron alrededor de 80 organizaciones de la sociedad civil (OSC), ONG y entidades gubernamentales. Se organizó una sesión de trabajo para debatir la estrategia de REDD con entidades de la sociedad civil y círculos académicos, entre ellos, la Universidad de Costa Rica, la Universidad Nacional de Costa Rica, el Instituto Tecnológico de Costa Rica, el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza, el Instituto Nacional de Biodiversidad, y la Fundación para el Desarrollo de la Cordillera Volcánica Central. Se entregaron paquetes de divulgación de información, incluido el Paquete de Preparación, a una amplia variedad de entidades gubernamentales, OSC, y organizaciones de pueblos indígenas y campesinos, incluidas la ONF, la Junta Nacional Forestal Campesina, la Asociación Coordinadora Indígena y Campesina de Agroforestería Comunitaria Centroamericana, la Federación Conservacionista, ARADIKES, la Mesa Nacional Indígena, la Coordinadora ADII-Caribe, y la Red de Reservas Privadas. 64. Con respecto a los pueblos indígenas, el FONAFIFO ha trabajado con las ADI y las organizaciones de pueblos indígenas mediante diálogos bilaterales, divulgación de información y reuniones iniciales de planificación, a fin de comprender sus problemas e inquietudes. Desde 2009, se han realizado visitas y reuniones con las ADI en Talamanca y otras organizaciones de los pueblos indígenas, como RIBCA, en la región del Atlántico. También se llevaron a cabo reuniones iniciales con las ADI en el Pacífico Sur y otras organizaciones de los pueblos indígenas, como ARADIKES. El FONAFIFO respaldó una serie de talleres de planificación organizados por los propios pueblos indígenas en la región del Atlántico para debatir específicamente la Propuesta de Preparación para REDD, la propuesta para el diseño de la estrategia nacional de REDD y lo que esto significa para ellos. El FONAFIFO ha proporcionado información sobre REDD a los pueblos indígenas, principalmente a través de la estructura de las ADI, y a los campesinos de manera limitada. Sin embargo, recientemente, el taller nacional de SESA (4 y 5 de mayo de 2011) reunió a representantes de los pueblos indígenas de las regiones del Atlántico y del Pacífico, y también a representantes de las ADI y estructuras tradicionales, organizaciones comunitarias de pueblos indígenas y organizaciones locales de mujeres indígenas, como la Asociación Comunal de Mujeres Indígenas de Talamanca. Además, el 12 de 19 mayo 2011, se realizó un evento público patrocinado por el BIC y Conservation International en la ciudad de Washington, donde el FONAFIFO presentó su visión para la estrategia nacional de REDD. 65. Propuesta para el futuro. El proceso de consultas relativas a REDD se basará en los canales y las redes de comunicación existentes, y en el capital humano y social que se desarrolló gradualmente a través de tres décadas de pruebas y ejecución de programas ambientales de incentivos en Costa Rica. Las consultas también tendrán como fin abrir nuevos cauces y ayudar a expandir aún más el capital social, especialmente con respecto a las comunidades indígenas. Dichas consultas procurarían mejorar la conducción al lograr la participación de las partes interesadas en el proceso de toma de decisiones, y permitirían que Costa Rica presente una estrategia de REDD respaldada por una visión compartida de todas las partes interesadas. 66. El plan de consultas se elaborará con mayor detalle en cuanto a los contenidos específicos, los grupos destinatarios y las metodologías, como prioridad inmediata al comienzo de la fase de preparación para la iniciativa de REDD. Para la elaboración de la estrategia de REDD, el FONAFIFO prevé realizar consultas adecuadas y apropiadas desde el punto de vista cultural con las partes interesadas clave identificadas. La participación activa de las comunidades indígenas y de sus organizaciones representativas, así como también de los campesinos, sería fundamental para garantizar un proceso de consultas abierto, transparente y creíble. Con respecto a los campesinos, el FONAFIFO prevé analizar el perfil socioeconómico de aquellos cuyo sustento dependa de los bosques y, sobre la base de un proceso adecuado de consultas, proponer medidas para abordar sus inquietudes. Los campesinos cuyo sustento depende de los bosques son un grupo grande desde el punto de vista demográfico en Costa Rica, y generalmente se encuentran entre los más pobres. El FONAFIFO continuará brindando información y garantizará que ella llegue a los miembros de pueblos indígenas que no son miembros de la estructura de las ADI, así como también a las organizaciones, asociaciones y cooperativas que representan a otras comunidades locales no indígenas. Al mismo tiempo, el FONAFIFO prevé colaborar con la estructura institucional a fin de garantizar la participación de las instituciones indígenas representativas y de los campesinos en los distintos niveles de la estructura, incluidos la toma de decisiones, la ejecución, el seguimiento y la evaluación. 67. Como primer paso, el FONAFIFO prevé realizar una actividad de localización de las partes interesadas y un análisis para comprender sus funciones, mandatos y capacidades particulares, a fin de elaborar una estrategia y poner en práctica de la manera más eficaz un proceso de consultas durante la fase de preparación que se adapte a los perfiles particulares de cada grupo de partes interesadas, especificando a las mujeres como un subgrupo diferenciado. El plan de consultas específico se diseñará de acuerdo con las siguientes directrices: i) inclusión significativa de todas las partes interesadas pertinentes para lograr un consenso nacional sobre la estrategia de REDD; ii) diseño y ejecución de consultas con el firme apoyo de las partes interesadas; iii) divulgación de la información correspondiente a través de canales adecuados de comunicación según las particularidades de cada grupo de partes interesadas; iv) garantía de que los resultados sean equitativos, especialmente para los campesinos cuyo sustento dependa de los bosques y los pueblos indígenas, y v) diseño de indicadores adecuados para el seguimiento y la evaluación de los impactos. 20 68. En el proceso de consultas, se prevé prestar atención especial a las mujeres, a fin de comprender sus inquietudes y problemas específicos. Por ejemplo, muchos pueblos indígenas de Costa Rica tienen un sistema matriarcal, en el cual las tierras se heredan por la línea materna y las mujeres desempeñan una función primordial en la toma de decisiones de la comunidad. La función de las mujeres en la gestión y el uso de recursos y en el proceso de toma de decisiones es fundamental, por lo que deberán evaluarse los posibles impactos en dicha función. 69. El proceso de consultas se centra específicamente en lograr que los pueblos indígenas y los campesinos cuyo sustento depende de los bosques participen activamente en el diseño de un proceso de consultas que sea el más adecuado para alentar su mayor participación durante el proceso de preparación. El proceso procura facilitar el fortalecimiento de las organizaciones locales y regionales para que estén en mejores condiciones de identificar y expresar los problemas que las afectan. La estrategia de consulta respaldará un proceso de consultas para los pueblos indígenas que tenga en cuenta sus estructuras tradicionales y no tradicionales, su propio proceso de toma de decisiones, y sus canales socioculturales de comunicación y deliberación. Además, el FONAFIFO apoyará un proceso de autoselección para identificar al representante de los pueblos indígenas para el Directorio del FONAFIFO. 70. Mecanismo de reclamación. El mecanismo de reclamación será gestionado por la entidad del FONAFIFO denominada “Contraloría de Servicio�, que se creó por ley y es responsable de recibir y procesar las reclamaciones en nombre de cada uno de los organismos específicos del Gobierno. Para el caso específico del procesamiento de reclamaciones y quejas relativas a la estrategia de REDD, se prevé que la Secretaría Ejecutiva de REDD (dentro del FONAFIFO) recibirá y comunicará la reclamación o queja a la Contraloría de Servicio, que coordinará con el departamento pertinente del FONAFIFO a fin de elaborar la respuesta institucional correspondiente. El Grupo de Trabajo de REDD comunicará la respuesta institucional a quien haya iniciado la reclamación o brindará más asesoramiento sobre la respuesta a preguntas relacionadas con la ejecución de la Propuesta de Preparación para REDD y el diseño de la estrategia nacional de REDD. El mecanismo de reclamación incluirá procedimientos específicos de recepción, documentación, seguimiento, investigación y generación de informes que serán gestionados por la Contraloría de Servicio con el apoyo de la Secretaría Ejecutiva de REDD, en conjunto con el asesoramiento del Grupo de Trabajo de REDD. 71. Comunicaciones/extensión. El Gobierno reconoce que elaborar y ejecutar una estrategia de comunicaciones para REDD es fundamental para brindar la información correspondiente a las partes interesadas, intensificar la naturaleza participativa del proceso de REDD y garantizar la transparencia. El FONAFIFO realizó una serie de talleres iniciales de divulgación de información y ha comenzado el diálogo sobre REDD con diversos grupos de partes interesadas, incluidos los pueblos indígenas de las regiones del Atlántico y del Pacífico. Se llevará a cabo un nuevo conjunto de acciones de comunicación para garantizar que la divulgación de la información sea adecuada desde el punto de vista cultural y llegue a las partes interesadas relevantes. Se acordó que el FONAFIFO realizará lo siguiente: i) establecer acuerdos institucionales para las tareas de comunicaciones, ii) movilizar los recursos humanos y financieros necesarios, y iii) desarrollar y ejecutar una estrategia integral de comunicaciones, 21 comenzando con una encuesta de referencia sobre las comunicaciones. La estrategia de comunicaciones también respaldará los procesos de consultas y SESA. 72. Divulgación de información. La Propuesta de Preparación para REDD se publicó en el sitio web del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques en junio de 2010, y en el sitio web del FONAFIFO en julio de 2010. Después de varias revisiones, la versión final se publicó en mayo de 2011. También se distribuyeron materiales informativos. Durante la fase de preparación, se prestará atención especial a la divulgación de materiales en idiomas indígenas. Políticas de salvaguarda que podrían aplicarse 73. En el siguiente cuadro, se presentan las políticas de salvaguarda que se ponen en práctica en la etapa de formulación de la idea del proyecto. La categoría de salvaguardas ambientales propuesta esta etapa es la siguiente: B. Salvaguardas Sí No Por determinar Evaluación Ambiental (OP/BP 4.01) X Hábitats Naturales (OP/BP 4.04) X Bosques (OP/BP 4.36) X Control de Plagas (OP 4.09) X Recursos Culturales Físicos (OP/BP 4.11) X Pueblos Indígenas (OP/BP 4.10) X Reasentamiento Involuntario (OP/BP 4.12) X Seguridad de las Presas (OP/BP 4.37) X Proyectos relativos a Cursos de Agua Internacionales X (OP/BP 7.50) Proyectos en Zonas en Disputa (OP/BP 7.60) X Uso Experimental de los Sistemas de los Prestatarios para Abordar las Cuestiones Relativas a las Salvaguardias X Ambientales y Sociales en los Proyectos Financiados por el Banco (OP/BP 4.00) Financiamiento tentativo Fuente: (millones de US$) Prestatario/receptor BIRF AIF Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques 3,4 Total 3,4 22 Información de contacto Banco Mundial Persona de contacto: Laurent Debroux Cargo: Especialista Superior en Recursos Naturales Teléfono: +1 (202) 473-3581 Correo electrónico: ldebroux@worldbank.org Prestatario/cliente/receptor Persona de contacto: Juan Carlos Pacheco Cargo: Viceministro, Ministerio de Hacienda Teléfono: +506 2258-3875 Correo electrónico: pachecojr@hacienda.go.cr Organismos de ejecución Persona de contacto: Jorge M. Rodríguez Zúñiga Cargo: Director Ejecutivo, Fondo Nacional de Financiamiento Forestal Teléfono: +506 2257-8475 Correo electrónico: jrodriguez©fonafifo.go.cr Si desea información adicional, comuníquese con: The InfoShop Banco Mundial 1818 H Street NW Washington, DC 20433 Teléfono: (202) 458-5454 Fax: (202) 522-1500 Sitio web: http://www.worldbank.org/infoshop 23